Vale. Entendemos, asumimos y aceptamos que el término metrosexual no está del todo extendido y que, de momento, no son mayoría los hombres que se suman a esta tendencia. Sin embargo, una rutina básica de cuidados implica, además de cumplir a rajatabla ciertos mandamientos, evitar a toda costa cometer errores de bulto. Sí, esos que se repiten con frecuencia, que son casi universales y que hay que corregir. Los repasamos. Seguro que te sientes identificado con más de uno:
1) Las colonias nunca deben usarse a modo de after shave. No debemos confundirnos. Una cosa es que los after shave contengan alcohol y otra que las fragancias sustituyan a este básico. Si usas colonia solo conseguirás irritar tu piel y resecarla en exceso. Los after shave, en cambio, te ayudarán a calmarla, a prevenir irritaciones y a evitar la aparición de los temidos granitos.
2 ) No. El jabón de pastilla o el gel que utilizas en tu ducha matutina no es apto para limpiar tu cara. Es imprescindible que uses un producto específico para el rostro, adaptado a tu tipo de piel. Con el gel o la pastilla sólo conseguirás resecar tu piel y crear un efecto rebote, es decir, que tus glándulas sebáceas generen más grasa.
3 ) No te excuses en los estudios que demuestran que la piel del hombre es un 30% más gruesa que la femenina para aplicar sin piedad en tu rostro los mismos productos que utilizas en tu cuerpo. Eso significa que no puedes utilizar ni el mismo gel, ni el mismo exfoliante, ni la misma crema hidratante. La piel del rostro tiene una naturaleza diferente -es más fina y más grasa- y otras necesidades.
4) Tampoco busques refugio en las afirmaciones científicas que avalan que la piel de los hombres puede llegar a ser un 50% más grasa que la de las mujeres para no usar crema hidratante. Una piel grasa también necesita hidratación. Debes utilizarla a diario, olvidándote de la creencia generalizada en el sector masculino de que las cremas pueden provocar la aparición de granitos. La clave está en elegir la correcta. Si tienes una piel grasa, decántate siempre por productos oil free (libres de aceites) y no comedogénicos para evitar la obstrucción del poro.
5) Es cierto que la piel masculina es menos propensa a las arrugas, ya que suelen llegar a los 40. Sin embargo, el proceso de envejecimiento no te es indiferente. Por eso, es recomendable que a partir de los 30 utilices una crema envejecimiento y, siempre te protejas del sol, a diario. Sin excusas ni excepciones, usando siempre un SPF mínimo de 30.
6) Olvídate. El gel de ducha no sirve para lavar tu cabello. No pretendas ahorrar dinero, tiempo y espacio con esta estrategia, ya que lo único que conseguirás es debilitar tu cabello y resecar y/o irritar tu cuerpo cabelludo. Precisamente, problemas tan generalizados como la caída del cabello pueden estar originados por cueros cabelludos irritados y maltratados. La composición de un gel de baño no está pensada para que sea utilizada en el cabello. Por eso, o utilizas un champú suave o un producto 2 en 1 específico. Actualmente existen muchos geles aptos para cuepo y cabello.
7) Las manos dicen mucho de ti y es una de las partes de tu cuerpo en la que más se fijan las mujeres. Es obvio que necesitas una crema hidratante de manos en tu baño. No obstante, como sabemos que es inevitable la sensación oleosa que deja, te recomendamos que la apliques por la noche.
8) A la hora de practicar deportes al aire libre, no puedes olvidarte de la protección solar. Está demostrado: usando protección solar a diario -y esto implica también los días nublados- prevenimos el envejecimiento en un 60%.
9) Puedes dejarte la piel en tus sesiones de deporte, pero si te olvidas de la fase previa de calentamiento y la posterior de estiramientos estás perdido. Respecto a la fase de calentamiento es primordial para evitar lesiones. Aunque el tiempo varía en función de la práctica que se vaya a llevar a cabo, los especialistas recomiendan que no excedan una duración de 20 minutos. Los estiramientos no se deben llevar a cabo sólo con los músculos implicados en la práctica, sino con todos los grupos musculares que hayamos utilizado durante el ejercicio.
10) Ya se sabe que la virtud está en el punto medio. Por eso, no vale de nada que te excedas en una comida o en una noche de copas y que al día siguiente optes por el voto de abstinencia y suprimas una comida. Has de buscar el equilibrio.
Info: MenStyle. Escrito por Ana Morales y fotos de SXC/Greg Kessler.
1) Las colonias nunca deben usarse a modo de after shave. No debemos confundirnos. Una cosa es que los after shave contengan alcohol y otra que las fragancias sustituyan a este básico. Si usas colonia solo conseguirás irritar tu piel y resecarla en exceso. Los after shave, en cambio, te ayudarán a calmarla, a prevenir irritaciones y a evitar la aparición de los temidos granitos.
2 ) No. El jabón de pastilla o el gel que utilizas en tu ducha matutina no es apto para limpiar tu cara. Es imprescindible que uses un producto específico para el rostro, adaptado a tu tipo de piel. Con el gel o la pastilla sólo conseguirás resecar tu piel y crear un efecto rebote, es decir, que tus glándulas sebáceas generen más grasa.
3 ) No te excuses en los estudios que demuestran que la piel del hombre es un 30% más gruesa que la femenina para aplicar sin piedad en tu rostro los mismos productos que utilizas en tu cuerpo. Eso significa que no puedes utilizar ni el mismo gel, ni el mismo exfoliante, ni la misma crema hidratante. La piel del rostro tiene una naturaleza diferente -es más fina y más grasa- y otras necesidades.
4) Tampoco busques refugio en las afirmaciones científicas que avalan que la piel de los hombres puede llegar a ser un 50% más grasa que la de las mujeres para no usar crema hidratante. Una piel grasa también necesita hidratación. Debes utilizarla a diario, olvidándote de la creencia generalizada en el sector masculino de que las cremas pueden provocar la aparición de granitos. La clave está en elegir la correcta. Si tienes una piel grasa, decántate siempre por productos oil free (libres de aceites) y no comedogénicos para evitar la obstrucción del poro.
5) Es cierto que la piel masculina es menos propensa a las arrugas, ya que suelen llegar a los 40. Sin embargo, el proceso de envejecimiento no te es indiferente. Por eso, es recomendable que a partir de los 30 utilices una crema envejecimiento y, siempre te protejas del sol, a diario. Sin excusas ni excepciones, usando siempre un SPF mínimo de 30.
6) Olvídate. El gel de ducha no sirve para lavar tu cabello. No pretendas ahorrar dinero, tiempo y espacio con esta estrategia, ya que lo único que conseguirás es debilitar tu cabello y resecar y/o irritar tu cuerpo cabelludo. Precisamente, problemas tan generalizados como la caída del cabello pueden estar originados por cueros cabelludos irritados y maltratados. La composición de un gel de baño no está pensada para que sea utilizada en el cabello. Por eso, o utilizas un champú suave o un producto 2 en 1 específico. Actualmente existen muchos geles aptos para cuepo y cabello.
7) Las manos dicen mucho de ti y es una de las partes de tu cuerpo en la que más se fijan las mujeres. Es obvio que necesitas una crema hidratante de manos en tu baño. No obstante, como sabemos que es inevitable la sensación oleosa que deja, te recomendamos que la apliques por la noche.
8) A la hora de practicar deportes al aire libre, no puedes olvidarte de la protección solar. Está demostrado: usando protección solar a diario -y esto implica también los días nublados- prevenimos el envejecimiento en un 60%.
9) Puedes dejarte la piel en tus sesiones de deporte, pero si te olvidas de la fase previa de calentamiento y la posterior de estiramientos estás perdido. Respecto a la fase de calentamiento es primordial para evitar lesiones. Aunque el tiempo varía en función de la práctica que se vaya a llevar a cabo, los especialistas recomiendan que no excedan una duración de 20 minutos. Los estiramientos no se deben llevar a cabo sólo con los músculos implicados en la práctica, sino con todos los grupos musculares que hayamos utilizado durante el ejercicio.
10) Ya se sabe que la virtud está en el punto medio. Por eso, no vale de nada que te excedas en una comida o en una noche de copas y que al día siguiente optes por el voto de abstinencia y suprimas una comida. Has de buscar el equilibrio.
Info: MenStyle. Escrito por Ana Morales y fotos de SXC/Greg Kessler.
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